En el marco de las libertades individuales y empresariales, La Libertad Avanza presentó en las últimas horas un proyecto que modifica la ley 11825 que establece un horario de tope para la venta de bebidas alcohólicas en comercios de la provincia.

La iniciativa legislativa lleva la firma del presidente de bloque libertario Agustín Romo, quien en sus fundamentos señaló que "consideramos que dicha normativa constituye una restricción desproporcionada e injustificada de las libertades individuales. La limitación horaria carece de fundamentos sólidos, razonabilidad normativa y evidencia empírica que demuestre que haya contribuido significativamente a mejorar la seguridad o el bienestar de la población".

En esa línea, Romo expuso que "la actual redacción de la ley resulta contradictoria e ilógica. Por ejemplo, ¿qué diferencia sustancial justifica que el horario de venta sea aún más restrictivo a partir del 30 de abril respecto al 1 de mayo? Esta disposición no presenta una razón clara ni probada que explique tal diferenciación, ni ha demostrado generar mejoras tangibles en la problemática que se pretende abordar", apuntó.

Asimismo, explicó el legislador libertario que "es importante destacar que la normativa no evita que una persona con problemas de adicción acceda al alcohol, ya que dicho consumo puede ocurrir en cualquier horario y lugar. Las restricciones horarias tampoco impiden que una persona acceda a bebidas alcohólicas después de las 21 horas, ya sea porque las adquirió previamente, las consume en un bar o por otros medios. Por lo tanto, estas limitaciones resultan ineficaces para abordar el problema de fondo", señaló.

En tanto, sostuvo el diputado que "en el caso de que se trate de una problemática de la compra luego de las 21:00 horas se trate del consumo en la vía pública con posibles implicancias en la seguridad, cabe recordar que la Ley Nacional N.º 24.788 ya regula la prohibición del consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública. Si el espíritu de la normativa provincial es prevenir problemas asociados al consumo de alcohol, el camino elegido no es ni el más adecuado ni el más efectivo".

Y agregó: "Por otro lado, esta ley afecta de manera injustificada a los comerciantes bonaerenses, especialmente a aquellos cuyo giro comercial depende exclusivamente de la venta de bebidas alcohólicas. Esto constituye una restricción irrazonable al derecho al trabajo y a la libertad económica garantizada constitucionalmente".

También, apuntó el diputado, que "consideramos que los bonaerenses son ciudadanos responsables y plenamente capaces de decidir, tanto como vendedores como consumidores, sobre los horarios en los que deseen realizar la compraventa de bebidas alcohólicas".

Y finalizó: "La regulación excesiva no fomenta una sociedad más segura ni más responsable; por el contrario, limita derechos sin aportar soluciones reales".